CAMBIANDO LA MIRADA SOBRE LA ADOLESCENCIA

DESMONTANDO 3 MITOS SOBRE LOS ADOLESCENTES

Actualmente, la imagen que se tiene y se promueve de la adolescencia, sobre todo desde la población adulta, suele ser una imagen que incomoda, con bastantes connotaciones negativas. No es extraño escuchar frases como: “que miedo me da pensar en cuando mi hijo sea adolescente”, “los adolescentes solo causan problemas”... Esto se debe a diferentes factores, entre ellos la información que circula a nivel popular sobre esta etapa vital, información que, en muchas ocasiones, ni si quiera es cierta.

Esta imagen que se “vende” de la adolescencia no solo está presente en los adultos, sino que también cala en los niños y en los propios adolescentes; lo cual puede afectarles en la forma que tendrán de vivir esta etapa. Puede que les afecte provocándoles:

• Rechazo a vivir ese momento vital

• Miedo a convertirse en esos “monstruos” de los que tanto se habla

• Miedo a que ellos mismos se dejen de reconocer

• Miedo a que, como padres, les dejemos de querer

• Sentirse rechazados, incomprendidos o atacados

Además, esta idea de la adolescencia no solo va a perjudicar a los menores, sino también puede perjudicarnos a nosotros como padres y a las dinámicas y relaciones familiares.

Es por esto que hoy os traigo 3 falsos mitos de la adolescencia para desmentirlos y, con ello, también ir conociendo y comprendiendo mejor esta etapa y así poder empezar a tener un acercamiento y una mirada más amable hacia ese momento vital tan importante en la vida de toda persona.

1. Los adolescentes viven revolucionados por las hormonas: falso, aunque el cambio hormonal está presente, los cambios cerebrales son los que más van a afectar en esta etapa. Estos cambios cerebrales son los que van a permitir que se desarrollen:

- La implicación social: es decir, vincular con otras personas más allá de la familia. Les va a ayudar a conocer otras realidades y lo que a su vez les va a servir de ayuda para a saber quiénes son y comenzar su proceso de individuación.

- La experimentación creativa: es decir, ver el mundo desde otra óptica. A nivel de especie es bueno y adaptativo que siempre haya parte de la población que vea las cosas de forma diferente a lo establecido para que la especie evolucione.

- El aumento de la intensidad emocional: al sentir más intensamente las emociones el mensaje que estas transmiten se queda más gravado en la memoria, favoreciendo el aprendizaje emocional.

- La búsqueda de novedades: les sirve para conocer experiencias diferentes, estimular emociones y sensaciones. Todo ello les ayudará, a su vez, a conocer diferentes realidades, lo que les servirá también para conocer quiénes son, quienes quieren ser y aprender de sus vivencias.

2. La adolescencia es un periodo que hay quitarse de encima cuanto antes: falso. La adolescencia es una etapa que nos prepara para la vida adulta, por lo tanto, es necesario que exista y que los adolescentes la vivan como adolescentes que son y no como adultos y que su entorno se lo permita. Es necesario que no pasen este periodo deprisa y corriendo, sino que se tomen tiempo para cerrar etapas, vivir logros, equivocarse y aprender de todo ello, para poder llegar a la etapa adulta habiendo podido integrar y siendo capaces de regularse.

3. Los adolescentes se vuelven completamente independientes, ya no necesitan de su familia: falso. Es verdad que en esta etapa, la familia tomará un segundo plano en comparación con la infancia. Aunque nos resulte complicado, es necesario que el adolescente se distancie porque necesita (y es sano) conocer otras realidades para así ir conociéndose a sí mismo e ir creando su propia identidad. Es por esta razón, que en esta etapa toman un papel protagonista su grupo de iguales, lo que no quiere decir que la familia deje de importarle. El adolescente, sigue necesitando a su familia, desde otro lugar, pero la sigue necesitando.